Los carpaccios son platos beneficiosos para la salud y deliciosos para el paladar. Se realizan platos de esta especialidad con diferentes ingredientes. En este caso, el pescado o el marisco es uno de ellos, también con finas lonchas para su consumo más fácil e inmediato.
El elemento fundamental de los carpaccios de pescados es que han comerse crudos, pero para ello han debido estar en el congelador previamente. Debemos macerar muy bien cada pieza y dejarla reposar en la nevera el tiempo suficiente para ser consumido sin ningún tipo de riesgo. Te contamos de qué pescados se puede hacer un carpaccio.
Carpaccio de salmón
Una de las maneras de comer el salmón es en forma de carpaccio, donde se comerá crudo, por lo que se debe aliñar correctamente y prepararlo a conciencia. Para ello necesitaremos salmón rosado, cebollas, eneldo o bien otra especia que vaya bien con el salmón, aceite y sal para aderezar. Previamente es importante dejar el salmón en el congelador, luego lo sacaremos (sin que esté congelado) y cortaremos finas lonchas y lo recubriremos con la sal, el aceite, las especias, la cebolla…
Luego lo cubriremos todo con los distintos trozos con papel film de la cocina y lo dejaremos en la nevera unas dos horas siempre antes de que nos los podamos tomar.
Carpaccio de bonito
Como vemos, se pueden hacer carpaccios de múltiples pescados. El bonito, un pescado que aporta muchos beneficios al organismo, es perfecto para hacer carpaccio. Aconsejamos hacer filetes pequeños y muy finos del bonito, hacer una vinagreta aparte, mezclarlo todo y dejarlo también reposar en la nevera con papel fino y transparente. Hay quien deja algunas horas la mezcla y otros un día entero. Para servirlo, le echaremos sal al bonito y añadiremos la vinagreta encima, aunque ya habrá tenido suficiente sabor. El bonito también puede sustituirse por atún, delicioso y nutritivo.
Carpaccio de gambas
Y para darle mayor imaginación, el carpaccio de merluza y gambas es totalmente especial. En realidad, se pueden hacer de varios mariscos. En este caso, el carpaccio se elaborará de otra manera, primero cortando diferentes trozos de papel de film de cocina y echando aceite encima. Después pelaremos las gambas y las pondremos encima de cada papel con sal. Con el papel bien aplastado lo dejaremos reposar en la nevera. Pasadas las horas estará a punto para servir en lonchas finas en el plato, poner especias y comer.