La vieira es un molusco bivalvo que vive en aguas profundas en la mayor parte de los mares, sobre bancos de arena limpia y cerca de la costa. Su valva inferior es ondulada y más grande que la superior, que es casi plana. Las ondulaciones radian desde el vértice de cada valva, efectuando un dibujo similar a un abanico. Sus bordes son afilados y ondulados. Se alimenta de fitoplancton y partículas orgánicas en suspensión.
Es uno de los mariscos más característicos de la gastronomía del mar. No es sencillo diferenciar esta vieira de la gallega. En la gallega la valva superior es totalmente plana, y sus bordes ondulados no encajan perfectamente con los bordes de la valva inferior, sino que entran un poquito dentro de la valva, quedando los otros un poco sobresalientes. No es así en la vieira foránea, en la que la valva superior suele ser un poco ovalada y coincide perfectamente con la valva inferior.
Las vieiras desde el punto de vista nutricional son especialmente ricas en vitaminas del grupo B (destaca la presencia de B12) y minerales (alto contenido en potasio, selenio y magnesio) que ayudan a la prevención de enfermedades cancerígenas y cardiovasculares.
Esta vieira, procedente de aguas del Reino Unido, pasa unos estrictos controles sanitarios, y después se presenta depurada y eviscerada manualmente, con total garantía de no alcanzar los niveles de toxicidad prohibidos. La vieira la ofrecemos envasadas al vacío y congeladas.
Las vieiras pueden prepararse de múltiples formas, lo más habitual es hacerlas al horno con un sofrito de cebolla y pan rallado por encima. También se utiliza en brochetas de pescado y en empanadas. Son igualmente un excelente acompañamiento para arroces o ensaladas.
La vieira grande es un producto congelado que se transporta en frío, por lo que puede que el producto llegue descongelado a tu domicilio. Por eso se recomienda su consumo en los días posteriores a su recepción.