La lubina nunca falla debido a su carne blanca y sabrosa, aunque no intensa. No es de extrañar que sea un pescado reservado a fechas especiales. La versatilidad a la hora de cocinar este pescado es sorprendente. Y es que, tanto la lubina salvaje como la de piscifactoría, es la debilidad de muchos. La mayoría de los amantes de la lubina prefieren las recetas simples, a través de las cuales se puede saborear mucho más la carne de este pescado. Aquí os proponemos volver a las clásicas, al horno, para que las probéis en vuestras casas y disfrutéis tanto del placer de cocinar como del de comer.
Receta tradicional vasca, la lubina a la donostiarra
Resulta sencilla y muy vistosa. Para cuatro personas se necesitan cuatro lubinas de ración o un kilo de lubina en lomos, cuatro dientes de ajo, una guindilla seca, perejil, aceite de oliva virgen extra, sal y vinagre de vino blanco.
La lubina debe estar presentada de forma abierta y en una sola pieza. Si optamos por piezas, lo deseable es de 200 y 250 gramos cada una. Se precalienta el horno a 200º. Salamos las lubinas y se marcan en una sartén muy caliente con la piel hacia arriba. Luego se meten en el horno con la piel hacia abajo y se dejan diez minutos. Pasado este tiempo, se extrae del horno, se le añade un chorro de vinagre y también el sofrito que hemos preparado con aceite, ajo y guindilla cortada en tiras.
Lubina a la sal
Otro clásico es hacer la lubina a la sal. En este caso es necesario comprar lubina eviscerada y sin descamar. Indícanos que lo vas a preparar a la sal y te lo prepararemos de esta manera. Por cada lubina necesitaremos dos kilos de sal gorda. Hace falta precalentar el horno durante cerca de media hora a 250 grados. Luego, en una bandeja de horno se pone una base de sal, sobre la que pondremos el pescado. Se echa más sal sobre el pescado hasta cubrirlo enteramente, moldeando con las manos el contorno del pescado. Tras aproximadamente 20 minutos en el horno, cogemos la lubina del horno, rompemos y extraemos la costra junto a la piel del pescado y servimos los lomos.
Al horno con patatas
Para esta mítica receta necesitaremos una lubina grande, tres patatas, un pimiento verde, un tomate, una cebolla, un poco de vino blanco, aceite, sal y perejil. Se coloca en un recipiente para horno las patatas cortadas en rodajas con la cebolla y el pimiento cortados y el tomate perlado. Se añade un chorro de aceite y se sazona. Se debe de dejar 15 minutos tras los que se coloca la lubina sobre las verduras durante 10 minutos a 220 grados. Así de fácil.
Para comer rico y sano basta unas recetas sencillas al alcance de todos como estas, ¿cómo preparáis vosotros las lubinas? A nosotros también nos encanta algunas recetas menos tradicionales como con chips de boniato, calabacín y alcachofas, en salsa cremosa de boletus, almendras y Caviar del Tíbet o a la sal con tomates cherry.
2 thoughts on “Recetas clásicas al horno y triunfadoras para la lubina”
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Es una gran verdad: la lubina nunca falla.
Otra forma buena de cocinarla es a la parrilla, envuelta en papel de aluminio.
Tomamos nota de la sugerencia! gracias Marie!