Como ya hemos comentado en este blog, el pescado es fuente de ácidos grasos omega 3, grandes aliados del corazón. Algunas variedades cuentan además con minerales y nutrientes, como el fósforo o el hierro, indispensables para una correcta salud de la mujer durante todas las etapas de la vida, incluso la menopausia.
Al llegar a la edad de la menopausia, que se suele producir entre los 45 y los 60 años, la mujer sufre una serie de cambios que pueden alterar su organismo y su estado de ánimo: la depresión y el desanimo, se unen a problemas óseos o cardíacos y, además, es frecuente un aumento de peso, que puede derivar en obesidad. ¿La mejor forma de evitarlo? Una dieta variada y ejercicio diario.
Un excelente aliado: ¡El pescado!
Durante la menopausia se desaconseja el consumo de carne roja, ya que aumenta el riesgo de padecer enfermedades del corazón. A pesar de que la carne roja se contraindique, no hay que olvidar que es fuente esencial de hierro y proteínas, un descenso en el consumo puede producir anemia o problemas de articulaciones. No se trata de eliminar estos nutrientes de forma drástica, sino de buscar productos que los contengan de forma natural. ¿Se os ocurre un ejemplo? Por supuesto, el pescado.
De todos es conocida la presencia de omega 3, necesario en todas las etapas de la vida, en el pescado, clave para reducir el colesterol. Aumentar el consumo de pescado en la dieta semanal favorece la mejora de la salud cardíaca. El salmón o el nutritivo y delicioso atún son variedades que se deben tener en cuenta en todas las edades, pero sobre todo, durante la menopausia.
Uno de los problemas asociados a esta etapa, es el aumento de peso que, por un lado, pone en riesgo la salud, y por otro, reduce la autoestima y favorece la aparición, o el agravamiento, de los estados depresivos. Por estética o por salud, reducir las calorías ingeridas al día previene el aumento del peso. El pescado es fuente de nutrientes esenciales, pero ayuda a crear una dieta equilibrada, reduciendo la cantidad de calorías.
Bueno, pues ya lo sabes. Y, por cierto, mejor prevenir que curar, así que aunque todavía te quede mucho para la menopausia, no es mala idea aumentar el consumo de pescado ¡es mucho lo que puedes ganar!