Van a venir fechas donde el consumo de alimentos, dulces y salados, será una de las tónicas dominantes en las casas españolas. Con el fin de no pasarnos estos días y de cuidar un poco la alimentación, os damos algunas propuestas gastronómicas para estos días y consejos sobre cómo estar mejor en Navidad.
Aplicar la dieta mediterránea en Navidad
Siempre en la medida de lo posible, debemos aplicar la dieta mediterránea en Navidad. Es decir, si podemos hacer pescado con guarniciones de verduras para la comida de Navidad, cocinar con aceite de oliva, tomar vino, pero con moderación estaremos comiendo mejor, consumiendo alimentos ricos en vitamina b, evitaremos los excesos, y de paso, también nos encontraremos bien. Por ello mismo, y como hemos recomendado algunas veces, es preferible comprar alimentos frescos y de temporada.
Comer fruta en algún momento del día
Para que las digestiones no sean del todo pesadas, comeremos fruta de postre, y antes de los turrones. Y si no tenemos tiempo o bien nuestro estómago no puede más, recomendamos optar por cenar fruta en la cena que precede a la comida de Navidad. De la misma manera que podemos hacerlo en la comida que se hace antes de Nochebuena, pues ya dejaremos para luego platos algo más consistentes.
Maneras de cocinar
Se puede cocinar de muchas maneras aunque comamos pavo o ternera, y lo hagamos de manera abundante. Por ello y para nuestra salud es mejor utilizar recetas saludables, desde al horno, a cocida o al vapor.
Evita digestiones pesadas
Son muchos días de comidas y cenas, de manera que debemos ser cuidadosos y no comernos los turrones de una vez. Es mejor hacer comidas espaciadas, con sopa y pavo y algo de turrón para una, y cremas y pescado, y algo de turrón con fruta para otra cena. Ello hará que la digestión no sea pesada y siempre nos sobrará turrón para otras ocasiones especiales. Esto es indispensable si eres aficionado a alguna práctica deportiva.
Reducir el consumo de alcohol
Con tantas celebraciones, el vino y el cava pueden ser abundantes tales días. Es mejor reducir el consumo de alcohol para saborear aquel vino que tanto nos gusta en una o dos copas, o tomar una copa de cava en los postres. Hay que tener en cuenta que el alcohol es el nutriente más calórico tras las grasas, con lo que las consecuencias para la salud pueden ser bastante malas. Es mucho mejor dejar de un lado los licores en estas fechas tras la comida.